sábado, 28 de septiembre de 2013

¡Que cada día merezca la pena!

Al son de "Haz que cada día merezca la pena", como dice mi agenda positiva y preciosa de Mr Wonderful, los días van pasando, el verano ha volado, y estamos ya metidos de lleno en la vorágine estudiantil-currantil.
Llenar la casa de mensajitos positivos, un calendario hipermotivador y la autoconvicción de que uno puede, ayuda mucho a levantarse de un salto cada mañana. Y tenerle a él a mi lado, animándome y sacándome risas, buenos ratos y compartiendo la vida, ayuda más todavía. Y sentir a Él dentro de mi y compartirlo, también me da muchas fuerzas.

Así que como si se tratara de año nuevo, una ha hecho ya su lista de propósitos que ya están en marcha.
Uno de ellos, y en el que estoy centrando gran parte de mis fuerzas es aprobar ese examen, sí, ese en el que hay solo 961 plazas para todo España, pero que si estudias con constancia y esfuerzo, es posible. Luchar por el sueño de llegar a ser una especialista enfermera, no sé si matrona, enfermera pediátrica, comunitaria....pero una buena profesional ante todo. Sé que no es cuestión de vida o muerte sacármelo ya, pero en algún momento hay que coger las riendas, y ponerse a ello, porque sería una buena mejora, un cambio a mejor en mi vida. Así que por qué no?

Septiembre es el mes de empezar, y de retomar. Y este año le he dado más sentido todavía.

Que cada día merezca la pena.
Que tu sonrisa me siga alegrando los días.
Que en los demás siga descubriendo y aprendiendo tanto.
Que en lo sencillo esté lo inmenso,  y que sepa verlo.
Que no nos fallen las fuerzas.
Que los proyectos vayan cogiendo forma,
que no dejemos de soñar.
Que escuche más y hable menos....y aprenda a callar y contemplar.
Que no se nos olvide dar gracias, y tender las manos.


¡¡Un abrazote!!!






viernes, 6 de septiembre de 2013

Pobreza y humildad

Estuviste radiante, feliz, resplandeciente.
Todos los que te queremos esperábamos con ansia y mucha emoción este gran día. Y vaya que lo fue, superando expectativas. Porque en lo sencillo, en juntarnos amigos, familia, gente conocida y diferente...en unirnos para acompañarte en tu día ante Dios, en esa alegría desbordante...ahí se palpaba en el aire el AMOR.
Gracias porque eres uno de mis ejemplos vitales, un referente, una persona de la que aprendo mucho cada día. Admiro lo consecuente que eres en tu vida, cómo llevas a cabo todo lo que te propones  y lo cercano que estás siempre aunque haya tierra de por medio. Tienes iniciativa, y no temes a los retos...un gran evangelizador en las nuevas tecnologías, y en las aulas, y en la calle, y en casa.
 Me encantó que en la homilía de la primera misa dieras tu testimonio, cosas terrenales,experiencias que todos podemos llegar a vivir en un momento vital. Es una bonita manera de acercarse a los demás, te hace  humano y sencillo, una persona entre la gente. 

Sólo quiero felicitarte públicamente. Me siento orgullosísima de nuestra familia. Feliz de tener un hermano sacerdote,que es pobre y humilde, que lo demuestra, y que no teme a nada, porque lleva a Dios muy dentro. Tengo la suerte de poder vivir la fe plenamente , de compartir contigo tantas vivencias bonitas, conversaciones, rezos.

Que sigamos vaciándonos para recibir  tanto, que tendamos nuestras MANOS VACÍAS para llenarnos. 
Te quiero muchísimo

Tu hermana,

Elena